El mantenimiento de los polígonos de Costa Vella y A Sionlla hace aguas

Farolas caídas, calzadas deterioradas, papeleras rotas y mucha suciedad

Ese es el resumen de uno de los polígonos mas importantes de Galicia. Los polígonos de Costa Vella y Sionlla el primero con una gran influencia comercial tanto en la capital gallega como su área metropolitana, puede considerarse que por parte de la administración y gobiernos carece de la importancia que se merece. Por otro lado, es polígono de A Sionlla, uno de los mas destacados en cuanto a volumen de empresas ya implantadas y las que están próximas a su abertura.

De poco sirve que tanto el gobierno local como el autonómico estén en disputas por ver a quien concierne el mantenimiento de una de las zonas con tanto poder económico para la ciudad de Santiago de Compostela, al final el problema, quien lo sufre es el ciudadano.

La suciedad acumulada en las aceras de sus calles y en las orillas de la calzada dejan claro que los servicios de limpieza pisan muy poco sus calles. Rejillas casi tapadas por los restos arrastrados por la lluvia son uno de los ejemplos del abandono en el que se encuentran ambos polígonos. Otro es la suciedad acumulada en los bancos de madera, colocados en la rúa Rioxa mirando hacia una de las naves de venta de muebles, en los que resulta evidente que nadie en su sano juicio se sentaría en ellos.

La calzada presenta irregularidades en gran parte de las calles de ambos polígonos. Aunque se actuó en la rúa Polonia, que es la que concentra la mayor intensidad de tráfico de toda el área, las marcas blancas de los pasos de peatones están completamente destrozadas.

La sensación de abandono llega a su máximo nivel al contemplar varias farolas situadas en ambos parques empresariales. La más llamativa es la luminaria, ubicada a unos pocos metros del depósito de la grúa municipal. La farola cayó, o la tiraron, hace meses, y desde entonces la única acción llevada a cabo fue acordonar la zona con rejas y cintas de plástico. Otras farolas situadas en las calles del vecino polígono de A Sionlla perdieron hace meses su rectitud como consecuencia probablemente de un golpe provocado por alguno de los camiones de gran tonelaje que circulan por la zona. Todos los elementos deteriorados carecen de señales de alerta para advertir del riesgo de caída.

La maleza en los solares sin edificar crece sin ningún control, incluso en los meses de mayor riesgo de incendios. Es de suponer que sus propietarios habrán recibido las notificaciones del Concello recordando la obligación de desbrozar las fincas, más aún cuando están situadas en un polígono empresarial donde un incendio podría tener consecuencias muy graves. Los hierbajos descontrolados sobrepasan los límites de los solares y colonizan también parte de las aceras. La vegetación crece igualmente en el borde de las aceras junto a las plazas de aparcamiento. Algo que sucede tanto en el área de A Sionlla aún sin desarrollar como en otras construidas del entorno de los centros comerciales de Costa Vella.