Finsa desembarca en Teruel con una gran fábrica.

La fábrica de mobiliario de cocina que construyen Finsa y el gigante francés propietario de Leroy Merlin funcionará en Teruel a finales de año
La fábrica de producción de piezas mecanizadas, componentes de mobiliario de cocina y elementos en formato kit que construyen Finsa y el grupo Adeo en la Plataforma Logística de Teruel (Platea) es una realidad. Aratea es el nombre del proyecto empresarial que une a la maderera con sede en Santiago con el grupo francés al que pertenecen firmas como Leroy Merlin y Obramat, con una planta de 32.000 metros cuadrados que comenzó a levantarse hace cerca de un año en una parcela de 145.000 metros cuadrados. El rápido desarrollo de la construcción permite que esté previsto el inicio de la fase de montaje de maquinaria en su línea principal a lo largo del próximo mes de marzo.
De esta forma, el cronograma de Aratea pasa por la puesta en marcha de la producción a finales del actual ejercicio 2025. Portales de empleo como InfoJobs publican ofertas de trabajo para la planta, que medios aragoneses consideran uno de los principales motores económicos de Teruel en los próximos años. En un primer momento, la fábrica arrancará con un centenar de empleos directos (a los que se suman otros 400 indirectos), una plantilla que irá creciendo de forma paulatina hasta alcanzar algo más de 200 operarios a finales del año 2028, cuando esté funcionando a pleno rendimiento.
Finsa cuenta ya con una planta de producción en la localidad turolense de Cella, situada a menos de diez kilómetros de Platea, que será la encargada de proporcionar tablero recubierto a la fábrica de Aratea, lo que supondrá la consolidación de ese centro de la compañía gallega. La nueva firma se beneficia además de una ubicación muy próxima a la terminal ferroviaria con que cuenta la plataforma logística de Teruel, dos circunstancias que reducen la huella de carbono que suponen los transportes por carretera.
El proyecto de Finsa y Adeo había sido declarado en abril del 2023 como inversión de interés autonómico por parte del gobierno de Aragón, lo que permitió agilizar los plazos administrativos en su desarrollo. Con una inversion de 75 millones.
La inversión que se anunció entonces se situaba alrededor de los 75 millones de euros en la primera fase, que incluye la adquisición de los terrenos, construcción de la nave y compra de equipos y maquinaria. El proyecto incluye una línea de despiezado a medida de tablero recubierto, líneas de mecanizados de piezas cortadas (canteado, ranurado, taladrado), línea de conformado y línea de embalado en kit. El centro estará dotado de un almacén automático inteligente, con vehículos auto-guiados para el transporte interno del material e instalación de placas solares en el tejado de la nave para el autoconsumo de la fábrica. En una segunda fase, que se prolongará hasta el año 2028, la inversión podría crecer en otros 10 millones de euros, para ampliar la capacidad productiva a través del montaje de una segunda línea de despiezado y un segundo de embalado.
Un proyecto que supone la expansión en Aragón de Finsa, que cerró el año 2023 con unas ventas de 1.223 millones de euros y 3.277 trabajadores.